domingo, 8 de abril de 2012

IMAGINACIÓN AL PODER

No sé por qué hay veces que ves en tu cabeza situaciones tan netas como si las hubieras vivido en primera persona. A veces estas situaciones son agradables y te sacan una sonrisa, y simplemente se tratan de un sueño o de una ilusión por cumplir. Pero yo lo veo claro como el agua e incluso mis sensaciones me transmiten a esa situación concreta, de forma que casi vivo realmente lo sucedido dentro de mis propios pensamientos.
Pero no siempre son situaciones que te guste ver o de algún modo vivir. Llevo cerca de dos años viendo en mi cabeza una imagen, una situación que no me deja dormir. Además que como he dicho antes es tan clara como si la estuviera viviendo como un mero espectador, ahí sentado en primera fila como si de un evento único y exclusivo se tratara, dedicado a mi persona con el único motivo de querer hacerme daño, e incluso llegan a reírse de mí mientras me miran. 
Quizás sea muy subjetivo esto que cuento, quizás no son más que otra de las tonterías que pasan por mi cabeza a diario, pero se me hace muy duro ver esa imagen tantas y tantas veces en mi cabeza como si de un recuerdo propio se tratara, un mal recuerdo (de los peores de mi vida, puesto que esta situación cambió bastante mi forma de pensar sobre las personas) que realmente no viví. Pero claro, tuvieron que mostrarme el camino de forma tan obvia que yo, aunque a veces sea o se haga el tonto, me imaginé la peor de las situaciones teniendo la certeza de que así fue (sin necesidad de confirmación oficial) y como he dicho ya varias veces en este post, viendo la situación en mi cabeza como si la hubiera vivido en primera persona.
Saludos.

2 comentarios:

  1. Ufff no se si te sigo o me he perdido por el camino...pero sea como sea, no deberias dejar que las experiencias de los demas marquen tu vida...

    ResponderEliminar
  2. Quizás sí que es algo complicado seguirme en esta entrada.
    Bueno, no es que las experiencias de los demás marquen mi vida, nunca he sido de los que se han dejado influenciar ni por actos ni por palabras. Pero a veces hay cosas que nos dejan tocados.

    ResponderEliminar